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Mostrando las entradas de octubre, 2024

DE QUÉ ESCRIBEN LAS MUJERES. 3 Las mujeres escribimos sobre la maternidad

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imagen y obra de Laetitia Ky? No quiero decir que todas escribamos sobre la maternidad, ni que todas tengan qué hacerlo, pero lo hacemos. Y no solo es interesante que las mujeres escribamos sobre ella sino sobre todo desde dónde se presenta cada tipo de maternidad. No tengo claro por qué mientras escribo esto oigo en mi interior un tipo de censura ¿por qué el primer tema que se me vino a la mente de lo que escriben las mujeres fue la maternidad? ¿Es el patriarcado quién me dicta la importancia de este tema, el mandato de pensar en la maternidad como un tema ineludible para todas las mujeres? ¿empezar con este tema me hace menos feminista? Tengo que admitirlo, la voz de mi censor particular me tortura y molesta, pero me gustaría responderle que la MATERNIDAD es el primer tema qué pensé para este ensayo porque es el tema que más me ha agobiado y fascinado desde que empecé a leer mujeres.  Cuando leí hombres nunca encontré una madre impresionante, nunca leí sobre lo conflictivo que re...

Neurodivergencias II: notas sobre la epilepsia.

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  “Fuego amarillo, te has convertido en epilepsia.  Viento del norte,  te has convertido en epilepsia  ¡Arréglate, pulso grande!  ¡Arréglate pulso chico!  Los dos pulsos en una hora, en media hora,  así sea, Señor.  Así te acabas  sobre trece montañas  sobre trece lomas,  ahí te acabas en medio de trece filas de rocas,  ahí te acabas en medio de trece filas de árboles” Rezo tzotzil para curar la epilepsia. Padecer epilepsia es una cosa del diablo. Al menos, así se percibe, tanto para quien la vive como para quien la observa. No parece extraño que en épocas ancestrales se creyera que la epilepsia era provocada por seres demoníacos y habitantes del inframundo, porque siendo totalmente honesta, ver a una persona sufriendo una crisis convulsiva puede resultar incómodo y hasta cierta medida perturbador. Alguien que caiga súbitamente al piso, con movimientos repetitivos de su cuerpo, temblando, gesticulando, gruñendo, con los ojos en...

Cosas que importan

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    Escribe esto en la pared: <<Nunca subestimes la audacia de una anciana peligrosa>>. Clarissa Pinkola**   Creo que varias personas que lean este texto habrán escuchado o leído a/de Clarissa Pinkola, uno de sus libros más reconocidos es Mujeres que corren con los lobos, el cuál no he tenido la oportunidad de leer y aquí comento un poquito el porqué.   Hace tiempo y no recuerdo quien, me recomendó leer a Pinkola, como es mi costumbre, busqué algo de información sobre ella y la deseché de inmediato porque la describían como psicoanalista junguiana. Fue mi primer prejuicio hacia ella, por una formación psicoanalítica bastante terca que recibí y luego, por mi cuenta también fui elaborando una idea propia de la propuesta junguiana, la cual terminó de (no) cuadrar cuando leí acerca de la maravillosa Sabina Spielrein [1] .   Bueno, el punto al que quiero llegar y gracias a que me deshice de falsos héroes, maestros del psicoanálisis ...

Vestido blanco

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Habré leído la novela Bella y oscura de Rosa Montero en el año 2005. Tuve la fortuna de ser una adolescenta que pudo vagar sola por la ciudad sin tanto peligro como el que existe ahora. Me gustaba caminar en círculos viciosos por las calles del centro. Una de mis paradas era la librería de Sanborns.  En ese entonces relacionaba lo íntimo con la escritura de mujeres. Y con “íntimo” me refería a lo profundo y misterioso, como encontrar una puerta secreta en la habitación más oscura de una casa.  En la portada del libro de Rosa Montero aparece una niña disfrazada de ángel, tal vez para la representación de una pastorela. Su vestuario se encuentra algo desajustado, como si hubiera estado jugando justo antes de que le tomaran la foto. Ella no sonríe, sus ojos son grandes y negros. Más que inocencia se aprecia un rostro sabio y rebelde.  Además de la imagen, me llamó la atención el título del libro. ¿Qué mujer no define su infancia como bella y oscura? Yo quise leer la novela ...